Dulce Domingo en Fischerhude

Destacado

Maravillosa fotografía de MS       paseando en Fischerhude.

Maravillosa fotografía de MS paseando en Fischerhude. mivelerobergantin.wordpress.com

Durante mi última estancia en Alemania me hablaron de un pueblecito que es famoso por sus tartas.

Quien me conoce un poquito, sabe que es oír cualquier palabra dulce y se me activan todos los radares.

24 horas después ya había encontrado FISCHERHUDE.

 

casita4

La casa preferida de Lisa.

Fischerhude se encuentra a 30 kilómetros al este de Bremen, en el Norte de Alemania, y es un lugar idílico para pasar la sobremesa de un primaveral Domingo.

Si visitas Bremen y tienes varios días, merece la pena un paseo en coche hasta pueblos cercanos, como Worpswede y Fischerhude.

Arbolados paseos comunican preciosas casitas en las que se vende desde mermeladas caseras hasta increíbles antigüedades.

casitas

Sigue leyendo

La Gomera: Vuelta a la Isla.

Destacado

Cuentan que cuando Dios terminó de modelar el mundo y mientras se sacudía la tierra de las manos admirando su obra, un pedacito de barro cayó en medio del Océano Atlántico. Lo miró y se decidió a estirarlo un poquito con los dedos. Así, redondita y llena de barrancos, creó a La Gomera.  Al siguiente día, Dios descansó.

La Gomera es uno de esos sitios a los que no se llega por casualidad.

Agando

Roque Agando. Centro de la Isla. Panorámica de MS. mivelerobergantin.wordpress.com

La Gomera es la isla con más montañas de Europa, que se reparten en 370 Kilómetros cuadrados y los 1.487 metros de altura que alcanza su pico más alto, Garajonay.

Su posición en medio del Atlántico y el hecho de ser la segunda más pequeña de un Archipiélago de 7 islas, un islote, varios roques y lo que sea que está por llegar, implican que el viajero que la conoce tiene un interés particular.

A La Gomera se puede llegar en avión desde Tenerife o de Gran Canaria y en barco desde el Puerto de los Cristianos, en el Sur de Tenerife.

San Sebastian

San Sebastián desde el barco. Fotografía de MS

Mi humilde, pero fundamentada recomendación, es que no pierdas la oportunidad de llegar cruzando el mar. Atrévete a desafiar el viento saliendo a cubierta, deja que el salitre te salpique la cara, cruza los dedos para que puedas ver algún delfín y no pierdas de vista el Teide suspendido sobre las nubes mientras entras en la bahía de San Sebastián.

Sigue leyendo

Potsdam: el Telón de Acero, Federico el Grande y las patatas

Berlín es uno de los destinos europeos más visitados en estos tiempos.

Palacio Sans Souci de Federico el Grande

Palacio Sans Souci (Sin Preocupaciones) de Federico el Grande. Fotografía de Miguel Chico.

Su efervescencia cultural, recorridos alternativos, cafés literarios y los mercadillos junto al Muro (¡Saltemos el Muro!) no pasan desapercibidos para todos los culoinquietos, buscavidas o intelectuales.

Las afueras de Berlín también destilan este eclecticismo tan atrayente.

Potsdam, la ciudad de los contrastes, es un buen ejemplo de ello. A tan sólo 20 kilómetros de la ciudad de Berlín y fácilmente accesible en tren de cercanías, que puedes tomar en muchas estaciones de la ciudad con Tickets para zonas A-B-C, es una magnífica opción para dedicar un día de tu viaje a la capital germánica.

Hay varias compañías que organizan tours guiados en español para visitarla.

Puente que sufrió la división y da la entrada a Potsdam.

Puente que sufrió la división y da la entrada a Potsdam.

Parques infinitos, canales navegables hasta los Países Bajos, vegetación frondosa y palacios ornamentados crean el decorado más absurdo para diseñar la nueva Europa y firmar el Telón de Acero.

Potsdam ha visto káiseres, ha visto tronos y rodar coronas, ha visto luz y ha estado en sombras, ha visto huídas sigilosas y persecuciones políticas, ha firmado Tratados, ha formado a líderes rusos en su sede de la KGB y ha engendrado la nueva Europa.

La Historia no se esconde.

La Historia no se esconde.

Potsdam,  igual que Berlín, ha de pasar a la historia.Y tú, no debes perdértela.

Sigue leyendo

Aventura Ártica I: 66º 33′ 45»

Colores de Polo. Vista desde el Fiordo de Lyngen.

Colores de Polo. Vista desde el Fiordo de Lyngen.

Siempre he creído que hay lugares en los que nos encontramos bien porque sí. Y otros, en los que no.

Aunque suene a misticismo, estoy convencida de que el magnetismo de la Tierra no nos llega igual a todos, ni en todas sus partes.

Yo al menos he experimentado sensaciones de bienestar nada más pisar algunos suelos. Y me he sentido mal en otros aunque haya dispuesto de una grata compañía.

Llegar a un lugar blanco en todos sus rincones, frío, muy frío, pegado al Océano, donde en verano brilla el Sol a media noche y en Invierno las noches se llenan de luces… Eso la Tierra lo tiene que notar… Y tu cuerpo lo recibe.

Sé que esto parece más raro que encontrar a dos canarios en el Polo Norte.

Pero qué de sorpresas nos da la vida.

Gracias a Marcos por ésta.

 

Sigue leyendo

¡Saltemos el Muro!

Hoy es un domingo extraño para mí. Me gustaría volverme un poco alemana.(Sólo por hoy). Necesito adelantar varias cosas pendientes. Y además, hacerlo convencida, sin lamentar no recibir estos rayos de Sol que tantos días llevaban escondidos.

Hoy querría que me compensara hacer lo que debo, no lo que quiero. Sentirme un poco más fuerte para no sucumbir a esas pequeñas tentaciones que retrasan (y endulzan) el camino.

Para no olvidar mi firme propósito hago sonar Die Walküre de Wagner. Así, mientras las valquirias, hijas de la diosa tierra defienden su olimpo germánico y dan descanso a las almas de los guerreros caídos, yo me traslado al rincón más firme de la ciudad de Berlín para compartirlo con vosotros.

El Muro en la Puerta de Brandemburgo

El Muro en la Puerta de Brandemburgo

Sigue leyendo

UN VIAJE POR LAS AZORES

Cola de cachalote y volcán de Pico. Fotografía de MS tomada desde la zodiac.

Cola de cachalote y volcán de Pico. Fotografía de MS tomada desde la zodiac.

Siempre que me descubro disfrutando sin buscarlo del aire que respiro, me traslado de inmediato a tres lugares: La Gomera, Nueva Zelanda y Açores.

 Hoy quisiera recordar este último. Te invito a compartirlo con este fado.